La Gran Comisión es un llamado a la evangelización y a la misión cristiana en todo el mundo. Jesús les dio este mandato a sus discípulos para que ellos, a su vez, lo transmitieran a todos aquellos que vinieran después de ellos, incluyendo a nosotros hoy en día. V 19 – 20 “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
20enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.”
El significado profundo de la Gran Comisión es que todos los
cristianos tienen la responsabilidad de compartir el evangelio con todos
aquellos que no lo conocen. También significa que debemos estar dispuestos a
hacer discípulos, es decir, enseñar a otros sobre la fe cristiana y ayudarles a
crecer en su relación con Dios.
¿Cómo podemos cumplir la Gran Comisión?
Hay varias formas en que podemos cumplir la Gran Comisión en
nuestra vida diaria. Una de ellas es compartiendo el evangelio con nuestros
amigos, familiares, compañeros de trabajo y otras personas que conocemos.
También podemos ser misioneros y viajar a lugares donde el evangelio no ha sido
predicado antes.
Además, podemos apoyar a misioneros y organizaciones que
trabajan en la evangelización y el discipulado en todo el mundo.
También podemos ayudar a quienes dedican su vida a compartir
y hacer discípulos a través de diferentes plataformas digitales utilizando la
modernidad, a través de la cual se puede llegar literalmente hasta los últimos rincones
de la tierra.
¿Por qué es importante la Gran Comisión?
La Gran Comisión es importante porque es la tarea principal
de la iglesia. Jesús nos llamó a hacer discípulos de todas las naciones, y como
cristianos, debemos seguir su ejemplo y obedecer su mandato.
Además, cumplir la Gran Comisión es una forma de amar a
nuestro prójimo. Al compartir el evangelio con otros, les estamos dando la
oportunidad de conocer a Cristo y de tener una relación personal con él.
También estamos ayudando a construir el Reino de Dios en la tierra.
La Gran Comisión es un mandato importante dado por Jesús a
sus discípulos. Es un llamado a la evangelización y a la misión cristiana en
todo el mundo. Como cristianos, tenemos la responsabilidad de compartir el
evangelio con todos aquellos que no lo conocen y de hacer discípulos. Al
cumplir la Gran Comisión, estamos ayudando a construir el Reino de Dios en la
tierra y amando a nuestro prójimo de la manera en que Jesús nos llamó a
hacerlo.
No solo basta con bautizar a muchas personas para creer que
ya hemos cumplido con el mandato de la gran comisión, el mandato completo es
que tenemos que enseñarles la palabra de Dios y a cumplirla de todo corazón, el
conocimiento y la obediencia es lo que nos convierte en discípulos y no en solo
seguidores o asistentes en alguna congregación.
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