Todos los seres humanos tenemos dificultades cada uno de una manera diferente y en un tiempo diferente, algunos tienen dinero en abundancia, pero sufren en otros aspectos.
Otros tienen una excelente familia
en todo les va bien pero el tormento en su vida es la escasez económica.
La vida cristiana no es un camino
fácil. Los creyentes en ocasiones experimentan dificultades, ya sea en su vida
diaria, pruebas que la vida presenta o incluso la persecución que puedan
recibir por su fe en Jesucristo.
En este capitulo se nos da un a
esperanza maravillosa, nos dice que, aunque como cristianos sigamos teniendo
dificultades, Jesucristo siempre estar con nosotros. V 7 “y a vosotros que sois atribulados,
daros reposo con nosotros, cuando se manifieste el Señor Jesús desde el cielo
con los ángeles de su poder,”
El apóstol Pablo escribió la carta a los Tesalonicenses como
una forma de alentarlos en medio de su sufrimiento y tribulación. A través de
este pasaje, Pablo les dice a los creyentes que el Señor Jesús los consolará y
les brindará consuelo en medio de sus dificultades. Esta promesa arroja luz y
esperanza en medio de la oscuridad de la tribulación y nos muestra que Dios
está con nosotros en todo momento, especialmente en nuestros momentos más
difíciles.
Jesucristo no nos quita los problemas porque son para nuestra
edificación, pero si nos da las fuerzas necesarias para superarlos. Filipenses 4:
13 “Todo lo puedo en Cristo
que me fortalece.”
nos recuerda la importancia de confiar en Dios en medio de la
dificultad. Cuando pasamos por pruebas, es común que nos sintamos vulnerables,
desamparados y solos. Sin embargo, este pasaje nos asegura que no estamos
solos, y que Dios está con nosotros para consolarnos y guiarnos. Isaías 43: 2 “Cuando pases por las aguas, yo
estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego,
no te quemarás, ni la llama arderá en ti.”
Muchas personas dicen: si estando con Cristo vamos a tener
problemas y si no estamos con Cristo igual tendremos problemas, entonces para que
acepto a Cristo en mi corazón.
La respuesta es muy sencilla, cuando estamos sin Cristo los
problemas siempre terminan doblegándonos y convirtiéndose en obstáculos que nos
impiden avanzar. ya que los tenemos que soportar en nuestras fuerzas.
Cuando estamos con Jesucristo nosotros dominamos a los problemas
y los con vertimos en oportunidades para aprender y avanzar. Ya que es Jesucristo
quien lleva nuestra carga. Salmos 55: 22 “Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No
dejará para siempre caído al justo.”
Un cristiano para triunfar en este mundo no le pide a Jesucristo
que le quiete los problemas, le pide que lo fortalezca para poder luchar y
Triunfar.
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